En nuestra clínica dental de Gijón realizamos tratamientos mediante sedación consciente.
Con la ayuda de un anestesista, llevamos al paciente a un estado de semi consciencia donde es capaz de colaborar con nosotros en todo el tratamiento, manteniendo un estado de calma, bienestar y ausencia de dolor.
La sedación consciente la recomendamos para cirugías largas y para pacientes que presentan un miedo a enfrentarse a un tratamiento dental, así como niños y pacientes con necesidades especiales.
Durante la intervención el paciente esta monitorizado en todo momento por el medico anestesista que controla sus constantes vitales.
El proceso el totalmente reversible y el paciente abandona la consulta sin ningún síntoma que pueda impedirle hacer vida normal.
Durante la intervención el paciente esta monitorizado en todo momento por el medico anestesista que controla sus constantes vitales.
El proceso el totalmente reversible y el paciente abandona la consulta sin ningún síntoma que pueda impedirle hacer vida normal.
El paciente obtiene beneficios tanto durante la cirugía como en el postoperatorio.
Al hacer la cirugía mediante sedación en nuestra clínica de Gijón, podemos disminuir al máximo la ansiedad evitando, por ejemplo, las malas experiencias de la anestesia local.
El postoperatorio es mas favorable ya que administramos la medicación por la vía que coloca el anestesista de tal manera que reducimos la inflamación y el dolor postoperatorio mediante el uso de corticoides y analgésicos que actúan más rápidamente.
Otra ventaja es la posibilidad de realizar sesiones más prolongadas ya que el paciente se encuentra más confortable, acortando así, el numero de visitas.
Cualquier paciente que no presente una patología grave de base, puede ser candidato a realizar una intervención bajo sedación consciente.
Pacientes con ansiedad frente a procedimientos dentales, tratamientos prolongados o complejos (por ejemplo, cirugías de implantes).
Si tienes alguna enfermedad general que no esté descompensada (diabetes, hipertensión, cardiopatías estables.
En caso de niños, pacientes con necesidades especiales o simplemente que tengan un reflejo al vomito muy marcado pueden ser también candidatos hacer un tratamiento con sedación.
Ninguna en especial.